¿Por qué duele?
Impactos y traumatismos en la parte frontal del pie causan el llamado “dedo del corredor” -y el dolor es fuerte.
Causa
Síntomas
Tratamiento
Prevención
Regreso al entrenamiento
Cuando no sientas más dolores al:
Choques repetitivos causan inflamación de la articulación, o posibilidad de fractura de los huesos del dedo gordo del pie, generando hinchazón y fuertes dolores”
Atención reforzada al sentir dolores próximos al dedo gordo del pie, cuyo nombre correcto es hallux. La causa de la lesión en el hallux generalmente está ligada a la actividad; por eso se le llama de “dedo de corredor”. Una serie de diferentes dolores puede alcanzar esa región del pie (el hallux se ubica en la primera articulación metatarsofalangeana), la mayoría de ellas nacidas de la exposición exagerada e impactos constantes, o choque directo. Otras razones de la lesión en el hallux son la degeneración osteoarticular, la caída de peso sobre el dedo gordo o tropezones (a veces hasta puede oírse nítidamente el momento exacto del traumatismo), más graves cuando causan desplazamientos o hinchazón.
Los tratamientos básicos inmediatos (urgentes en el caso de heridas expuestas) aceleran el retorno al deporte, pero si esos cuidados no fuesen suficientes serán necesarios diagnósticos más precisos. El hallux es una región compleja de los pies. Por eso, exámenes más sofisticados que radiografías (resonancia magnética o cintigrama óseo) son usados para diferenciar fracturas de inflamaciones, así como casos de formaciones óseas (sesamoideo bipartito). Existe, además, la posibilidad de inflamaciones de tendones y huesos (metatarsalgia, gota, artritis y hasta sesamoiditis -huesos sesamoideos conectados sólamente a tendones o músculos), nervios pinzados o irritados (neurona) o desvío óseo (juanetes o hallux valgus).
Cómo sucede
Los corredores suelen exigir demasiado las articulaciones del hallux, en superficies duras o entrenamientos excesivos. Los huesos del dedo gordo (falanges) sufren con los choques y los movimientos repetidos al punto de irritar los tendones y los músculos, causar infecciones y sufrir traumatismos (hasta fracturas). Con eso, una serie de estructuras -primer metatarso, la falange próxima del hallux, los huesos sesamoideos, los tendones (flexores, extensores, abductores y aductores), la placa plantar, los ligamentos colaterales, la cápsula y el cartílago articular- puede ser lesionada. En todos estos casos, se sienten dolores en toda la región afectada.